El Apocalipsis, según Camps

(Publicado en las Provincias 29 -01.06)
Comenzó la semana hablando de la oportunidad de ampliar, o no, la posibilidad a muchos valencianos y valencianas de sentirse representados en nuestras Cortes. Y acaba con la amenaza de un "sunami popular" contra quienes tan sólo reclaman ampliar la democracia, anunciado por Gonzalez Pons. Es el resultado del Apocalipsis, según Camps, que se avecina si alguien osa reclamar más democracia, o dejar el valenciano como ha estado durante veinte años en el Estatuto, no sólo sin que nuestra lengua se resintiera, sino progresando adecuadamente, sobre todo después de que un gobierno socialista, el de Lerma, llevara a aprobación la Ley de Uso y Enseñanza del Valenciano.
Está claro que ahora se trata de combatir la noble propuesta de ampliar los margenes de la repsentación democrática, después de veinte años desarrollo estatutario, sin ser capaz de explicar porqué. Se ha planteado una ocasión magnifica para decir si se está dispuesto, o no, y por qué. Ese es todo el pecado que tanto irrita al P.P.
Si yo fuera Camps y tuviera en mi mano las encuestas que Camps le enseña a su partido, y Gonzalez Pons a los medios de comunicación, no dudaría en ponerme a la cabeza de la reivindicación de bajar el listón electoral al 3%. Si, por contra, no lo estuviera tanto, seguramente mandaría a mis huestes con el guión del catalanismo, tan manido, poco imaginativo y tan cursi como deprimente para cualquier mente despierta; y cargaría las tintas contra el lider de la oposición, por haberme puesto en esa tesitura, hasta intentar demostrar que la calle es mía. Pero como, no soy Camps, ni soy del PP; a pesar de que mi partido tiene encuestas peores, estoy por ampliar la representación democrática, y no condenar al extraparlamentarismo, a quienes demuestran que han resistido a los tiempos y mantinen unas cotas electorales dignas de tener en cuenta.
Los principios se defienden por encima de los intereses electorales, y la coherencia se demuestra en los hechos, El PP tiene una ocasión de oro para obrar según esa idea de ser los más demócratas del mundo, que tanto les gusta a algunos proclamar, y tan poco hacen por demostrar.

Todo lo demás son pretextos para tapar la cobardía ante las urnas y los recelos ante la democracia. La manipulación de la opinión pública pervirtiendo sus sentimientos, querido Esteban, no es más que un tic ególatra propio de esos dictadorzuelos que en América Latina están siendo desterrados por sus respectivos pueblos.
Ya se pueden reivindicar libros históricos, o amenzar con hacer de la calle un pasillo más de la sede del PP. ¡Quien te ha visto y quien te ve, P.P.! De llamar perros que ladran por las esquinas a los manifestantes, a no resistir quince días sin manifestarse, no importa cual sea la causa.
Lo que teneis que explicar es: por qué llamais a los valencianos a manifestarse, contra quien tan sólo amenaza con la pacífica intención de ampliar la democracia, por qué os negais a ampliar la posiblidad de representación a los valencianos, y clamais contra lo que, con toda dignidad , nuestro Estatuto ha sostenido durante veinte años, en los que hemos tenido un desarrollo notable como Pueblo que, si apelamos a la memoria, ha sido a pesar de algunos de los que ahora se envuelven en la Señera como si fueran un "souvenir turístico", más que unos ciudadanos con conciencia de país.
Si a manifestarnos fueramos, tendríamos que haber instalado un campamento pernamente en la verja de Canal 9 por la grosera manipualción que hace de la información, el despilfarro de los impuestos de los valencianos que practica, y el desprecio con que trata a los no adeptos al PP. Y no sólo no lo hacemos, sino que no pedimos cada día que se pase un vídeo de rectificación. No sólo no valdría para nada en esta tierra, es que sería estupido.
Andrés Perelló